martes, 13 de mayo de 2014

El almacén de ramos generales Saint Loranz


Isidro Casanova era apenas un esbozo de pueblo cuando se levantó uno de sus primeros y más emblemáticos comercios. La estación del Ferrocarril Midland, el obrador de los trabajadores turcos que iban construyendo edificios ferroviarios tendiendo las vías, la fábrica de hilos de seda de Don Isidro y algunas que otras casitas edificada para el personal de la textil.Lo demás era campo y verde. Pero frente a la estación de trenes (en la esquina de Tokio y La Plata, hoy avenida Francisco Seguí) Lorenzo Labrouquiere, francés, abrió en los años 20 el primer almacén de ramos generales del pueblo. Tal como se ve en la foto, un edificio imponente y lo demás llanura pampeana. Por esos años el comercio, parada obligada para tomar una "copita", se llamaba Saint Loranz. Tiempo después el almacén pasó a manos de don Santiago Jaureguy, yerno de Labrouquiere, quien le dio una notable fama en las décadas siguientes del siglo XX. Hoy nada queda de eso. Apenas la sodería lleva el apellido de don Santiago, como un tímido homenaje a esta postal de pueblo.